Lo Justo entrevista a Alonso Quinteros y a Héctor Gálvez sobre el cine peruano y temas de memoria
Ayer en Lo Justo, Gabriel Salazar, jefe del Área de prensa de la CNDDHH y conductor interino de este programa, entrevistó a Alonso Quinteros, antropólogo audiovisual, para hablar del cine en nuestro país.
La entrevista, correspondiente a la parte final del programa, la pueden ver acá.
Nos enteramos que la producción de cine regional data de 1986, y que en la actualidad el costo de producción de una película rodea los 5000 soles. Una conocida excepción es El último guerrero chanka, dirigida por Víctor Zarabia, cuyo monto de producción habría llegado a los 30000 soles.
Justamente, para abaratar los costos, estas películas hacen uso de actores amateurs y familiares, para quienes se realizan talleres de actuación. Incluso se han dado casos de actores que, después de participar en numerosos proyectos, han dado el salto a la dirección, como es el caso de Lalo Parra.
Además, Quinteros comentó que las producciones vinculadas a temas de DDHH se suelen dar sobre todo "sobre casos puntuales de la violencia interna", si bien existen las que abordan problemáticas de corte más general, como un corto de Lalo Parra sobre discriminación.
Lo Justo también pudo entrevistar a Héctor Gálvez, director de Lucanamarca y Paraíso, precisamente sobre la producción de cine nacional relacionada a temas de memoria y violencia.
Sobre la reciente ola de producciones vinculadas al tema, Gálvez nos dio sus impresiones. Cuando uno vive un estado de shock tiene que pasar un tiempo para que la gente se recupere de ese estado y empiece a hablar sobre lo que pasó. "Somos una generación que creció con eso (la entrada de Sendero a Lima, coches bomba, etc.)", declaró.
Finalmente, comentó que las películas peruanas "no tienen mucha acogida, no tienen mucha química" con el público. En su opinión, "eso pasa porque la gente no quiere ver la realidad, la gente no quiere verse".