Por Mar Pérez

La Coordinadora Nacional de Derechos Humanos saluda la masiva y pacífica movilización de jóvenes que en la noche del jueves salieron a las calles de Lima para defender su derecho a un trabajo decente.  

Como ejercicio de la libertad de expresión y del derecho la participación política, la protesta social constituye un pilar fundamental de la democracia. Por ello, las autoridades están obligadas a garantizarla. Sin embargo, el jueves se registraron acciones vulneratorias por parte de la Policía Nacional del Perú, cuya responsabilidad debe ser esclarecida a fin de que no vuelvan a repetirse.

i.- Uso abusivo de la fuerza.-

Durante la movilización del día 18 se registraron numerosas acciones de uso abusivo de la fuerza contra los manifestantes, al golpearse violentamente a personas que protestaban pacíficamente o se encontraban huyendo. Las jóvenes manifestantes han sufrido tanto como los varones la brutalidad policial.

La información divulgada por los medios, así como la evidencia que hemos recogido en el acompañamiento directo de víctimas desvirtúan de manera contundente las declaraciones del Ministro del Interior Daniel Urresti, según el cual únicamente un manifestante ha resultado herido . Por nuestra parte hemos identificado al menos una decena de heridos, así como dos situaciones de particular brutalidad policial en la que es altamente probable que más personas hayan resultado lesionadas, aunque no hayan podido ser individualizadas.

Un grupo policial especialmente cuestionado por su agresividad y violencia ha sido la Policía Montada, a cuyos integrantes se ha observado cargando contra manifestantes que se movilizaban pacíficamente, y golpeándoles con sus fustas, inclusive una vez caídos en el piso.

En este sentido se ha recogido el testimonio de Katherine Illarik Egocheaga Guillén, estudiante de 20 años, quien señala que ella, junto con varios jóvenes se encontraba marchando en el Jr. Lampa. Los policías les cerraron el Jr. Puno y los direccionaron en dirección al Jr. Apurímac, donde los cercaron. Katherine intenta correr pero al haber una gran cantidad de personas, se tropieza. Entonces, la policía la golpea en el piso con sus macanas en las piernas, muslo y glúteos, ya que se encontraba boca abajo.Intenta correr, y en ese momento, la policía montada se acerca y la golpean por la espalda. Luego de ello, con la ayuda de algunos compañeros, sale del lugar. 

Así también el siguiente vídeo muestra en el segundo 24 como un efectivo a caballo golpea reiteradamente con su fusta a un manifestante sin justificación alguna.

El otro escenario de particular violencia policial se suscitó en torno a la cuadra 33 de la avenida Arequipa, donde varios manifestantes fueron brutalmente golpeados, inclusive cuando trataban de retirarse del lugar. En este lugar se han individualizado los siguientes heridos: 

1. Manifestante Diego Samamud Vallejo tendido en el suelo es atendido por paramédicos, como resultado de las contusiones infringidas por la Policía .

2. Ivonne Carrizales Arangoitia. Resultó policontusa.

3. Erick del Aguila Mori. Golpeado por la policía cuando estaba registrando los abusos policiales .

4. Luis Pastor Mori. Herida abierta en la cabeza.

5. También en este espacio fue brutalmente golpeada por la PNP una colega de nuestra institución, la joven Lucero Zúñiga Montaño, quien se había replegado junto con sus compañeros de estudios, pese a lo cual no pudo escapar de la represión policial.

Además, se han acopiado evidencias sobre otros cuatros manifestantes heridos:

6. Manifestante yace en el piso. De su cabeza brota un reguero de sangre .

7. Manifestantes con el rostro ensangrentado ( la foto de la chica fue tomada en Miraflores) .

8. Manifestante Alex Jesús Alejandro Lazo recibió impacto de bomba lacrimógena en el rostro .

9. Manifestante herido en la cabeza.

Así mismo, en torno al Olivar un patrullero de placa PL7590 arrolló a manifestante y seguidamente se dio a la fuga. (Ver minuto 1:25 ). 

Finalmente cabe señalar que la violencia policial ha tenido como uno de sus objetivos restringir la libertad de expresión. Inclusive se han recogido varias denuncias de manifestantes y comunicadores a quienes la Policía ha sustraído los equipos con los que trataban de registrar los abusos de las fuerzas del orden. Es el caso reportero Raúl Cartajena, a quien la Policía le sustrajo la tarjeta de memoria de su cámara.

ii.- Detenciones arbitrarias.

Durante la movilización del día de ayer se registraron 24 detenciones. Además otras personas fueron intervenidas por la Policía, conducidas a las dependencias policiales y posteriormente liberadas sin cargos. Los abogados del movimiento de derechos humanos acompañaron a la mayor parte de los detenidos a rendir sus manifestaciones, y se observó que las detenciones carecían de justificación, por tratarse de personas que únicamente habían estado movilizándose pacíficamente.

Resulta preocupante además que inicialmente se impidió a la abogada del IDL Cruz Silva ingresar en la Comisaría de San Isidro para dar asistencia a los detenidos. También se denunció en las redes que algunas personas que se acercaron a interesarse por los detenidos fueron golpeadas por la Policía.

Además se han registrado al menos dos casos de torturas a los detenidos en el interior de la Comisaría de Breña, en agravio de Luis Alfredo Vara Valdez y Gustavo Viscardo Galindo. El primero de los jóvenes ya ha sentado una denuncia formal señalando que la Policía le encerró en los servicios higiénicos de la dependencia policial, donde lo golpearon para obligarle a firmar un documento en el que aceptaba portar en su mochila una piedra. Se trataba de un intento de sembrarle una prueba inculpatoria que permitiera dar una apariencia de legalidad a su arbitraria detención.

Lima, 19 de diciembre del 2014